Al sur del mar Caribe y 65 kilómetros al norte de de la costa venezolana, Curacao nos sorprende con una mezcla entre la belleza de sus playas tropicales y la locura urbana de una isla cuya economía va más allá del turismo. El estado de Curazao, como se le conoce formalmente, comprende la isla principal y una pequeña isla deshabitada conocida como Klein Curacao.
La isla principal de Curacao tiene una extensión de 444 km² y en ella se encuentra la capital, Willemstad, una ciudad de fascinantes edificios antiguos y museos, cuya historia se remonta al siglo XVI. Entre las construcciones, los restos de antiguas plantaciones, ahora convertidas en parques, salpican la isla. Al oeste, la costa de Curazao cuenta con montones de pequeñas playas, ideales para bucear o simplemente tomar el sol y relajarse.
Además del hermoso núcleo histórico de Willemstad, la ciudad también tiene bastante tráfico, fábricas y barrios monótonos, ya que la creciente economía de Curazao no se basa solo en el turismo. Aun así, si buscas una autentica isla caribeña donde conocer el verdadero estilo de vida del Caribe, Curazao es tu destino.