El en otro tiempo hermoso palacio de Overgrown fue construido en 1910 como símbolo de poder de la familia real Polaca, un lugar donde celebraban opulentas cenas y fiestas para relajarse. Pero solo unas pocas décadas más tarde, tras la Segunda Guerra Mundial, la mansión fue convertida en escuela agrícola.
En 1970 el que fuera hogar de la clase gobernante de Polonia fue reacondicionado para albergar adultos con problemas mentales y posteriormente en reformatorio para niños con un comportamiento perturbador.
Finalmente en 1997 el centro fue cerrado y el edificio quedó a merced de la naturaleza, dando rienda suelta a las plantas y animales que lo han convertido en un edificio en ruinas. Resulta curioso cómo algo tan bello en un primer momento, puede llegar a convertirse en una estampa tan aterradora, aunque en cierto modo sigue siendo cautivador.